El Ciclo Rosa es un espacio de diversidad sexual audiovisual y académico. Está dirigida principalmente a la comunidad LGTB, pero invita a las personas heterosexuales para presenciar la muestra audiovisual.
Laura Ramírez Castaño
azulnaranja@funlam.edu.co
Tolerar, respetar, analizar y reflexionar acerca de la diversidad sexual son, entre otros, los referentes que presenta la octava muestra “Ciclo Rosa” que, del 14 al 19 de octubre, realiza en el Centro Colombo Americano de Medellín.
Este año el evento aborda el tema “Jóvenes, diversidad sexual y de género”. Catalina Acosta, directora de programa de cine del Colombo Americano dice que el “Ciclo Rosa se hace con el fin de crear un espacio en el cual la gente venga a aprender qué es diversidad sexual, qué es ser lesbiana, qué es ser bisexual, qué es ser heterosexual, qué es ser gay y qué es ser transformista o transgenerista”.
La iniciativa es de una red de salas alternas, “Red Kaymán”, que selecciona películas en los festivales gay del mundo y trae a Colombia las mejores. “Hay muchos festivales de cine lésbico y gay en el mundo. Por ejemplo, la película que estrenamos el martes fue La casa de Alice, que abrió el festival de cine lésbico y gay de Lisboa de este año. Todas estas personas se recorren los festivales del mundo y hacen una curaduría de las mejores películas y traen las mejores”, agrega Catalina Acosta.
Historias de otros lados
La muestra audiovisual del Colombo Americano consta de 19 películas, 15 cortometrajes y nueve documentales en los que se muestran historias románticas, aventuras inolvidables, comedias, dramas de lucha por la tolerancia, semblanzas biográficas de seres humanos con formas diferentes de amar la vida o trabajos experimentales en torno a la diversidad sexual, como una retrospectiva del realizador mexicano Julián Hernández y MixBrasil.
Este es uno de los pocos espacios en los cuales las personas que tienen una orientación sexual distinta a la heterosexual se expresan y se hacen sentir, valer y educar sobre sus derechos.
“La muestra y el encuentro académico son los dos componentes de Ciclo Rosa que, a lo largo de su historia, han contribuido a la búsqueda de nuevas formas de relacionarse, admitiendo la diversidad y la exploración de nuevas experiencias sociales. Este año se reúnen activistas, académicos, servidores públicos y jóvenes para conversar sobre el tema de la diversidad sexual y compartir experiencias e iniciativas al respecto”, dice la información de prensa del Ciclo Rosa 2008.
Sensibilidad
Abranson Aguilar, un transgenerista, asistente al Ciclo Rosa opina que “llevo tres años asistiendo al ciclo rosa. Me parece que este evento es fundamental como una oportunidad de cultura hacia la sensibilización de la diversidad sexual y del género, sobre todo hechos que se comunican y que, a su vez, son ejemplarizantes. Para aprender de ellos de lo mejor y para aplicar estrategias especialmente hacia la defensa de los derechos humanos de lesbianas, de gay, de transgéneros, bisexuales. No solamente a la juventud sino también, incluyéndome, como es el caso de la tercera edad”.
Los programas académicos “buscan propiciar el intercambio de experiencias y aprendizajes entre jóvenes, organizaciones juveniles y organizaciones que les apoyen en torno a la generación de propuestas de promoción e inclusión de la diversidad sexual y de género”, añade un boletín de prensa del Ciclo.
A este evento asiste una invitada internacional para hablar acerca de este tema: “este año trajimos a Belén, que es una experta en trabajo con los jóvenes LGTB, ya que creemos que en ellos está el potencial necesario para que esta causa llegue a expandirse más en la ciudad”, agrega Catalina Acosta.
Belén, de España
Belén Molinuevo, invitada de Cogam-España, es encargada del tema de juventud y considera que los heterosexuales no tienen una igualdad social ni una educación sexual en la formación e información de los jóvenes y que por esto es urgente una transformación cultural y unos cambios sociales en los cuales todos tengan los mismos derechos y deberes así tengamos distinta orientación sexual.
Jennifer González, asistente al Ciclo Rosa considera que “la sociedad no los aceptará, pero que al menos será más llevadero y la cultura va haciendo que se abran más espacios para este tipo de gente”.
Yorley Yocumá, asistente de comunicaciones del Ciclo dice que “la asistencia al acto de inauguración fue total, buena y eficaz. Además, cada año acude muy buen público y en comparación a los años anteriores ésta ha sido mayor”.
Laura Ramírez Castaño
azulnaranja@funlam.edu.co
Tolerar, respetar, analizar y reflexionar acerca de la diversidad sexual son, entre otros, los referentes que presenta la octava muestra “Ciclo Rosa” que, del 14 al 19 de octubre, realiza en el Centro Colombo Americano de Medellín.
Este año el evento aborda el tema “Jóvenes, diversidad sexual y de género”. Catalina Acosta, directora de programa de cine del Colombo Americano dice que el “Ciclo Rosa se hace con el fin de crear un espacio en el cual la gente venga a aprender qué es diversidad sexual, qué es ser lesbiana, qué es ser bisexual, qué es ser heterosexual, qué es ser gay y qué es ser transformista o transgenerista”.
La iniciativa es de una red de salas alternas, “Red Kaymán”, que selecciona películas en los festivales gay del mundo y trae a Colombia las mejores. “Hay muchos festivales de cine lésbico y gay en el mundo. Por ejemplo, la película que estrenamos el martes fue La casa de Alice, que abrió el festival de cine lésbico y gay de Lisboa de este año. Todas estas personas se recorren los festivales del mundo y hacen una curaduría de las mejores películas y traen las mejores”, agrega Catalina Acosta.
Historias de otros lados
La muestra audiovisual del Colombo Americano consta de 19 películas, 15 cortometrajes y nueve documentales en los que se muestran historias románticas, aventuras inolvidables, comedias, dramas de lucha por la tolerancia, semblanzas biográficas de seres humanos con formas diferentes de amar la vida o trabajos experimentales en torno a la diversidad sexual, como una retrospectiva del realizador mexicano Julián Hernández y MixBrasil.
Este es uno de los pocos espacios en los cuales las personas que tienen una orientación sexual distinta a la heterosexual se expresan y se hacen sentir, valer y educar sobre sus derechos.
“La muestra y el encuentro académico son los dos componentes de Ciclo Rosa que, a lo largo de su historia, han contribuido a la búsqueda de nuevas formas de relacionarse, admitiendo la diversidad y la exploración de nuevas experiencias sociales. Este año se reúnen activistas, académicos, servidores públicos y jóvenes para conversar sobre el tema de la diversidad sexual y compartir experiencias e iniciativas al respecto”, dice la información de prensa del Ciclo Rosa 2008.
Sensibilidad
Abranson Aguilar, un transgenerista, asistente al Ciclo Rosa opina que “llevo tres años asistiendo al ciclo rosa. Me parece que este evento es fundamental como una oportunidad de cultura hacia la sensibilización de la diversidad sexual y del género, sobre todo hechos que se comunican y que, a su vez, son ejemplarizantes. Para aprender de ellos de lo mejor y para aplicar estrategias especialmente hacia la defensa de los derechos humanos de lesbianas, de gay, de transgéneros, bisexuales. No solamente a la juventud sino también, incluyéndome, como es el caso de la tercera edad”.
Los programas académicos “buscan propiciar el intercambio de experiencias y aprendizajes entre jóvenes, organizaciones juveniles y organizaciones que les apoyen en torno a la generación de propuestas de promoción e inclusión de la diversidad sexual y de género”, añade un boletín de prensa del Ciclo.
A este evento asiste una invitada internacional para hablar acerca de este tema: “este año trajimos a Belén, que es una experta en trabajo con los jóvenes LGTB, ya que creemos que en ellos está el potencial necesario para que esta causa llegue a expandirse más en la ciudad”, agrega Catalina Acosta.
Belén, de España
Belén Molinuevo, invitada de Cogam-España, es encargada del tema de juventud y considera que los heterosexuales no tienen una igualdad social ni una educación sexual en la formación e información de los jóvenes y que por esto es urgente una transformación cultural y unos cambios sociales en los cuales todos tengan los mismos derechos y deberes así tengamos distinta orientación sexual.
Jennifer González, asistente al Ciclo Rosa considera que “la sociedad no los aceptará, pero que al menos será más llevadero y la cultura va haciendo que se abran más espacios para este tipo de gente”.
Yorley Yocumá, asistente de comunicaciones del Ciclo dice que “la asistencia al acto de inauguración fue total, buena y eficaz. Además, cada año acude muy buen público y en comparación a los años anteriores ésta ha sido mayor”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario